Por Danilo Correa
Es penoso admitir que nuestro rostro patrio,juega la misma función que un pamper y que nuestro himno nacional solo es cantado/entonado por alguna banda musical de cuerpos militares o policiales, cuando van a inaugurar la temporada de pelotas,una corrida de cangrejos,un complejo habitacional para «seres humanos»,un cementerio en zafra de campañas,o una letrina electoral.
En estos agujereados tiempos; usted se encuentra que en la mayoría de centros educativos públicos, privados y oficinas estatales tienen la Bandera Nacional engavetada en el funeral de nuestra historia patria.
Y todo esto obedece a que se perdió el amor por la libertad y el recuerdo independentistas de aquellos inmaculados hombres y mujeres que lucharon contra el pensamiento impuesto colonialista e injerencistas que aun hoy estamos escupiendo.1844/1965/1973… El mismo incoloro perfil arrugado por el tiempo, Hoy se excusan los carceleros del sistema.! ¡Son efectos de la Pandemia¡!
No hace muchos recreos que se iniciaron las jornadas escolares/educativas,y hemos pasado frente a escuelas públicas, en horas de izar la Bandera Tricolor, y en su horizonte se nos pierde el parpadear del orgullo de nuestra república.
¡Tenemos que volver a impartir educación cívica, pero esta vez a los profesores/maestros(as), para que alimenten a sus alumnos de un futuro verdaderamente democrático!
Estamos en medio de una ciénaga, porque los padres de familia, se ven obligados a extrañarse de sus hogares muy temprano de la ultima resaca de su estado mísero.
Porque el Estado no le garantiza una vida higiénica junto a su familia, entonces tienen que salir a la calle a trabajar y muchas veces a mendigar un trozo de patria.Quien promueve esta situación de lesa humanidad es el Estado Dominicano.
Una comunidad embrutecida es mas fácil de lapidar en el ruedo del fraude cívico
Nos han vuelto a inclinar otro siglo colonial sin himno de bandera en escolares labios infantiles.Casi sucede lo mismo en la mayoría de centros educativos privados;pero donde el irrespeto se confiesa es en las calamidades que pasan los colegios escolares,donde educan a los descamisados.Una perenne y solapada política de la clase en el poder…Entiendo que debemos regresar al cerebro patrio de:1844….1973.
Considero que en cada madrugada,al salir el sol,la garganta en pañales de la patria; debe cantar el himno en honor a una envejecida bandera,sembrada por héroes y mártires en su lucha y sacrificio por la consecución de una república libre e independiente.
Estos centros de estudios en manos de particulares,en su galería barriales,parece que se han ancianidad y mojados de lánguidas lágrimas.Y su voz nunca han logrado llegar en un oxidado concho a los oídos sordos de los diferentes ministros de educación, para conseguir aunque sea el color de nuestra bandera trasnochada de paz.
Y así ondear e imponer la cultura del respeto a las futuras generaciones. Porque ya esta esta encorvada de zapatos/telaraña…
Increíble, las banderas de los corruptos tradicionales partidos políticos,enriquecidas de poder reciben mas honras y respeto que el sagrado lienzo tricolor, que bajo tiros y lamparas,confecciono, María Concepción Bona y María Trinidad Sánchez ,en el paso de colonia a república,1844. y que se enarbolo por primera vez, en la Puerta del Conde.
En otras instituciones del Estado sucede lo mismo:
En época como esta de fuerte lluvia y vientos. usted dedique un largo tiempo en observar en oficinas y establecimientos públicos y veras algo desagradable y de lesa patria.como dejan morir lentamente la bandera mojada por lluvia y abofeteada por iracundos vientos.
Porque nadie recuerda que ahí yace un lienzo redentor,sino un trapo crucificado por la ignorancia del tiempo
En esta semana que hoy se encuna por las lluvias,observe enmudecido,por mi odio a la estupidez, lo mas simpático y tener que soportar a un motorista montar a una mujer usando como paragua/sombrilla, la encanecida trenza de un ejemplar de la bandera dominicana.
!Oye, nos estamos volviendo vampiro¡.
En la mayoría de destacamentos policiales o militares en las ciudades y campos, casi siempre como de costumbre,nos topamos con una bandera pidiendo que la ayuden, parece que la van a meter presa o torturar, como antes. Porque se nota su rostro decaído, con unos ojos de hambres.y casi siempre sin brasieres en sus colores. ! ¡Ahí nos topamos con el COVID-19 uniformado Anaconda.! ¡
Por esta cotidianidad que se reitera en ese marco teórico de referencia republicana, creo que tenemos la obligación civilista de impulsar un proyecto nacional en «retornar al alma de nuestra Bandera Tricolor».!Pero nadie de nuevo grita,en el callejón de este colectivo entierro!
Quien suscribe es periodista