Himno a la Patria

sábado, 18 de enero de 2025

El Cuento Que La Vida Me Contó

 


El Nuevo Diario

Opinión

Ejemplo de una niña

 

Actualizada el lunes, 16 de diciembre 2024 | 10:23 am

 

Por Víctor Elías Aquino

Un día, fui testigo en el tiempo del caso de una niña que, en minutos se convirtió en adulta, maestra y ejemplo de vida para un noble de Gales; uno de los países que forman la isla de Gran Bretaña, en el océano Atlántico, justo en las costas de Europa.

El Salmo 119, es el más extenso de La Biblia, tiene 176 versos, fijo mis ojos marrones mirando a través de cristal como de una lupa, y entonces pienso y casi sueño que me convierto en el topógrafo que fue mi padre Anselmo Aquino Ramos, y sin pestañar capturo la imagen del verso 14, donde leo: me he gozado en el camino de sus testimonios, más que toda riqueza.

A propósito de texto, Charles Spurgeon, conocido como el “príncipe de los predicadores” relató el caso de un incrédulo renombrado, mientras viajaba por Gales, le dijo a una niña a la cual vio leyendo su Biblia: “Bueno, querida, veo que estás haciendo tu tarea”.

La infante, lista como guerrera en batalla dispara su respuesta como un cohete ¿Tarea, señor –respondió ella- ¿ A qué se refiere? Y en seguida afirma estoy leyendo La Biblia.

Entonces, desde el interior de su corazón le pregunta: “¿Acaso tu madre no te dio un capítulo para leer? Si mi madre quisiera castigarme, no me haría leer La Biblia”.

El predicador inglés habla de las delicias cristianas en estas palabras: “Cuando la religión resulta deleitosa, es genuina. La Cristiandad verdadera “ es como una cascada de agua: toda fresca y destellante. Me gusta ver como brilla: un pequeño destello de religión, una chispita de gozo y deleite”.

Cierro este artículo, con una oración y deseo que cada vez que más amemos vivir la palabra de Dios, lejos…muy lejos de monotonías infructuosas, vacías, que no llenan el alma y no tienen a Jesucristo.

Finalmente le dijo :” No señor si mi madre quisiera castigarme, no me haría leer La Biblia. Es el libro más deleitoso de todo el mundo; ¡ y para mí es un placer cada vez que tengo un rato a solas para leer mi Biblia. Más adelante, confesó que le encantó encontrar algo de religión genuina”.

 

No lo digo yo, lo dijo Andy

 



Juan TH

Vamos bien, mejor que muchos otros. No lo digo yo, lo dice el economista Andy Dahuajre. Veamos:
Pocos lo creían posible. Pero terminó dándose, a pesar de que el 2024 quedará registrado como uno de los años más restrictivos en materia de liquidez monetaria. Poco importó que el Banco Central (BCRD) bajase 250 puntos porcentuales a su tasa de política monetaria (TPM) entre diciembre de 2022 y diciembre de 2024.

Como si la señal no le hubiese sido enviada, la tasa de interés sobre préstamos aumentó en 155 puntos básicos en el mismo período, cerrando en 15.05% en diciembre de 2024. Con una inflación de apenas 3.35%, la cuarta más baja entre todos los países no dolarizados del continente, la tasa de interés real que enfrentaron las empresas que tomaron préstamos promedió un 12.0% el año pasado. Esa elevada tasa de interés real redujo el crecimiento de la demanda privada de préstamos del sistema financiero, la cual terminó creciendo en 13.4% en el 2024, por debajo del 19.8% registrado en el 2023.

La caída en la tasa de crecimiento en la demanda de préstamos puede haber incidido en el bajo crecimiento real (ajustando por la inflación ponderada a precios de productor de EE. UU. y China) de las importaciones no petroleras en el 2024 (2.4%).

A pesar del considerable encarecimiento del financiamiento y del lento crecimiento real de las importaciones nacionales no petroleras, nuestra economía logró crecer al nivel de 5.0% y 5.1% que había pronosticado el BCRD para el 2024, liderando a toda la región si dejamos fuera al “outlier” de Guyana que, según la proyección del FMI, crecería 43.8% el año pasado.

Este notable crecimiento de la economía dominicana en el 2024 estuvo liderado por el sector servicios (5.4%), encabezado por sectores como el turismo y la intermediación financiera.

La manufactura local (4.7%), la de zonas francas (4.9%) y agropecuaria (4.9%) también mostraron un crecimiento considerable.
El sector construcción, a pesar de la incidencia negativa que tienen las elevadas tasas de interés reales en la construcción, logró un crecimiento cercano al 3.2%.

Estas estimaciones realizadas por el BCRD son compatibles con el crecimiento de las ventas nominales o ingresos brutos declarados a la DGII por los sectores servicios (13%), donde aparecen hoteles, bares y restaurantes (18%), intermediación financiera (21%) y comercio (10%); la manufactura (9%) y la agropecuaria (14%). Las ventas totales nominales declaradas por las empresas registraron un aumento de 12%, muy por encima del crecimiento del deflactor del PIB proyectado para el 2024 (4.0%).

A diferencia de años anteriores, en el 2024 la astringencia monetaria no fue ejecutada a través de la acumulación de deuda del BCRD. Esta se redujo de RD$1,009,666 millones a final de 2023 a RD$915,727 millones.

 

Cerrar La Puerta Al Candidato Tránsfuga

 



Eddy Olivares

Ha continuado siendo una preocupación para los partidos, sobre todo después de la sentencia del Tribunal Constitucional referente a los candidatos independientes, por lo que se espera que sea incorporado correctamente en la modificación pendiente de la Ley de Partidos.

Aunque la Enciclopedia Electoral ACE define el transfuguismo como “el proceso en que un miembro del Parlamento se desliga de su partido político a fin de unirse a otro o convertirse en un representante independiente”, también puede ser ideológico, como es el caso de pasar de ser socialista a neoliberal.

Sin embargo, el que tiene mayor incidencia es el parlamentario, tal y como resume también el Diccionario Electoral del Instituto Interamericano de Derechos Humanos, de los respectivos estudios de Reniu Mack y de López Arrivillaga, al establecer: “A fin de cuentas, el ámbito en el que el transfuguismo adquiere mayor relevancia es obviamente el que se encuentra vinculado a los cambios en la adscripción partidista de los representantes o, en otras palabras, el cambio de bancada”.

Al margen de las definiciones formales, en la Ley núm. 33-18, de Partidos, Agrupaciones y Movimientos Políticos, el legislador instituyó un nuevo concepto que denominó “transfuguismo en las candidaturas”, con el propósito de que quienes hayan competido en las elecciones internas de un partido, después de haber perdido, no puedan ser candidatos por otros partidos en las mismas elecciones.

En ese sentido, entre los requisitos para ostentar una precandidatura, el artículo 49-4 de la Ley 33-18, dice como sigue: “Que el aspirante a una precandidatura para un determinado evento electoral, en representación de un partido, agrupación o movimiento político no haya participado como candidato por otro partido, agrupación o movimiento político para el mismo evento electoral”.

No obstante, la prohibición del transfuguismo de candidaturas haber sido celebrada por todos los partidos como uno de los más notables aportes de la esperada Ley de Partidos, poco tiempo después, como consecuencia de un recurso de amparo del expresidente, Leonel Fernández y el Partido de los Trabajadores Dominicanos, el Tribunal Superior Electoral declaró inaplicables los artículos 49-4 y 134 de la Ley Orgánica del Régimen Electoral, debido a sus defectos de redacción.

El transfuguismo de candidaturas, a pesar de haber sido abortado temprano, ha continuado siendo una preocupación para los partidos, sobre todo después de la sentencia del Tribunal Constitucional referentes a los candidatos independientes, por lo que se espera que sea incorporado correctamente en la modificación pendiente de la Ley de Partidos.

Con el propósito de valorar en su justa dimensión la importancia de la selección de los candidatos la socióloga italiana, Anna Oppo, en el Diccionario de Política, de Bobbio, Matteuci y Pasquino, afirma lo siguiente: “…la actividad más importante del partido es la elección de los candidatos a las elecciones, que deben cumplir toda una serie de requisitos idóneos para el aumento del potencial electoral del partido”.

Para ser candidato a un cargo de elección popular es necesario competir en las elecciones internas de un partido, mediante una de las modalidades contempladas en la Ley 33-18, de Partidos, Agrupaciones y Movimientos Políticos, o ser beneficiado con una de las candidaturas reservadas, en el artículo 57, a los partidos políticos.

Como se puede apreciar, impedir el transfuguismo de candidatos es un motivo más que suficiente para que en la próxima legislatura se apruebe una adecuada modificación de la Ley núm. 33-18, de Partidos, Agrupaciones y Movimientos Políticos.


PLD:Gobierno Es Cómplice En El Ecocidio De Las Cuevas Del Pomier

 



Por Alfonso Ureña

Las actividades mineras indiscriminadas alrededor de las Cuevas del Pomier empujan las mismas a su desaparición, advierte el Partido de la Liberación Dominicana

Es imperativo que el gobierno asuma su papel como guardián del tesoro nacional que representa las Cuevas del Pomier en la provincia San Cristóbal y tome las medidas necesarias para garantizar que las generaciones futuras puedan conectarse con este legado cultural y natural único en el mundo.

La consideración es de Alfonso Ureña, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) al advertir que las actividades mineras indiscriminadas alrededor de las Cuevas del Pomier empujan las mismas a su desaparición irremediable.

“Las Cuevas del Pomier, un patrimonio cultural y natural de incalculable valor para la República Dominicana y el mundo, enfrentan una crisis grave debido a las actividades mineras indiscriminadas que las han llevado al borde del colapso. A pesar de la evidencia irrefutable presentada en múltiples estudios y denuncias, el gobierno dominicano y el Ministerio de Medio Ambiente ha mostrado una preocupante inacción frente a este desastre ambiental y cultural”, afirma el PLD por intermedio de su Secretaría de Medio Amb

Presidente Abinader Inaugura Techado Del Instituto Unión Panamericana Y Remozamiento Del Club Deportivo Renacer

 


Santo Domingo. – El presidente Luis Abinader encabezó la inauguración del techado del Instituto Unión Panamericana con el cual se garantiza un espacio más seguro y adecuado para las actividades deportivas, culturales y académicas de los estudiantes.

Esta obra, que tuvo una inversión de más de RD$24 millones de pesos, forma parte del “Plan Nacional de Techados de Canchas Escolares”, a través del cual serán intervenidos casi doscientos espacios deportivos en las escuelas de 158 municipios del país, con una inversión de 4 mil 116 millones de pesos.


En representación del ministro de Educación, Ángel Hernández, el viceministro de Acreditación y Certificación Docente del Ministerio de Educación, Francisco D’Óleo, dijo que hoy con la inauguración de esta majestuosa cancha, centro deportivo, los jóvenes estudiantes y futuros profesionales podrán desarrollar y conjugar sus competencias deportivas conjuntamente con sus competencias humanísticas, académicas y éticas.

“El presidente de la República y todo su equipo haciendo un uso efectivo de los recursos del 4% de la educación, propician con esta entrega a toda la comunidad la formación integral de cada uno de los estudiantes de este prestigioso centro educativo”, manifestó D’Óleo.


De su lado, la directora del Raiza Pineda reyes directora del Instituto Unión Panamericana
destacó el compromiso del presidente Abinader con la educación y el deporte y valoró el apoyo incondicional a qué ha brindado a este centro educativo.

Samelia Alexandra Acosta, estudiante de 6to. grado, en representación de los alumnos expresó su agradecimiento por esta cancha, que dijo, representa mucho más que un simple espacio para la práctica de deportes, es un símbolo del compromiso del presidente Abinader con la educación integral de cada uno de los jóvenes que necesitan un espacio donde fomentar el compañerismo, trabajo en equipo y la sana competencia.


Inaugura el Club Deportivo Renacer en Guachupita

Cumpliendo con su compromiso de fomentar el deporte y mejorar la calidad de vida de las comunidades, el presidente Abinader inauguró, además, el Club Deportivo Renacer en el sector Guachupita, Distrito Nacional.

Esta moderna infraestructura beneficiará a más de 50,000 habitantes, ofreciendo un espacio digno para la práctica deportiva y las actividades recreativas.

El Club Deportivo Renacer se encontraba en condiciones criticas y ha sido transformado en una instalación deportiva de primer nivel. La obra, de 814 metros cuadrados incluye un área de juego con piso de tabloncillo de madera, gradas, oficinas administrativas, sala de conferencias, sala de juegos, tableros portátiles FIBA, pizarra digital de anotación, techado de aluzinc, cafeteria, vestidores, baños y una verja perimetral para mayor seguridad.

En las actividades estuvieron presentes Faride Raful; ministra de Interior y Policía; Fernando Taveras, director de Infraestructura Escolar del Ministerio de Educación; Alberto Rodríguez, director del Instituto Nacional de Educación Física (Inefi) y Angel de La Cruz, presidente de la Comisión Presidencial de Apoyo al Desarrollo


Entre Versos y Párrafos

 


                                          En el Barrio no hay banderas

Cuento por René del Risco Bermúdez, poeta y narrador dominicano (1937-1972)
 
René del Risco Bermúdez (San Pedro de Macorís, 9 de mayo de 1937 – Santo Domingo, 20 de diciembre de 1972) fue un poeta, narrador y publicista dominicano. Fue una de las figuras esenciales en el tránsito de la literatura dominicana desde la “Era de Trujillo” a los intentos democratizantes de los años 60.
Al «Tinellel» lo liquidaron. Nunca olvidaré los ojos del «Tinellel» cuando el policía rastrilló de nuevo la «Cristóbal»; ahí mismo, casi entre las cejas; y él recostado de la pared, con las manos abiertas sobre la acera y la pierna encogida, sangrándole por la rodilla. Él hubiera querido hablar en ese momento, suplicar algo, pero el miedo como que se le atascó en mitad de la garganta y sólo se le vio esa tristeza terrible en los ojos cuando oyó el «cric-crac» de la ametralladora y miró esa boca filosa como una «gillette» doblada en redondo, oscilando de un ojo a otro, de la frente a la nariz, con la respiración excitada del policía.

Yo no sé bien, pero si por mí es, esa operación duró muchísimo tiempo, y la desesperación del «Tinellel» fue más grande por eso.
La verdad es que hay gente con mala suerte. Este tipo murió por una de esas cosas que dejan a uno bobo. Hay quien dice que es el destino, pero con todas las explicaciones que uno quiera darse, lo que hace es convencerse más de que ha sido una injusticia, una cosa que no debió suceder. No es que uno crea que hay gente entre los de uno que merece morirse, o que por lo menos su muerte se justifica. No, eso no; yo no pensaré nunca que se pueda justificar la muerte de nadie que no ha hecho cosas malas y que por el contrario lo que hace es defenderse en la vida, pero no se puede negar que a veces, cuando le dicen a uno «a fulano lo mataron» o «fulano no aparece»; uno lo lamenta, sí, pero no se sorprende porque la verdad es que hay gente que uno está esperando que la revienten de un momento a otro. Y eso se explica bien, porque uno ha visto mucho ya, y tiene por sabido que aquí al que se mueve mucho lo parten tarde o temprano. Por eso es que yo digo que lo del «Tinellel» fue mala suerte.

Yo sé bien que los muertos no piensan. Que el que se muere, se muere y nada más. Sobre todo, cuando se muere con la cabeza y el pecho hechos un solo «guayo». Pero no me puedo quitar de la mente la preocupación de qué estaría pensando este muchacho ahora, después que vio cómo es que suceden estas cosas. Me gustaría saber si sería capaz de arrepentirse. Bueno, mirándolo bien, cualquiera se arrepiente después que está muerto, y más como murió él… ¿Qué dirá si lo dejan hablar? A lo mejor se pone a insultar a todos los que estábamos esta mañana y que salimos huyendo en cuanto el Teniente se abalanzó hacia el grupo con la «Cristóbal» apoyada en el vientre. Siempre sucede igual; uno solo es el que comienza y todos se le van detrás, disparando como locos a todos lados, y se arma entonces un molote en el que nadie sabe para dónde huir, y eso es lo peor: ahí es cuando se aprovechan ellos, pues sólo tienen que apretar el gatillo y comenzar a rociar plomo y a Dios que reparta suerte. Eso prueba que hay refranes bien pendejos; aquello de «no van lejos los de alante si los de atrás corren bien» es pura pendejada cuando suena un rafagazo. A mí me gustaría ser de los que van alante siempre porque esta gente no apunta a nadie en particular, sino que lo hacen «a lo que agarre mi bola», y ahí es donde se fuñe mucha gente que se le queda a boca de jarro y le pasa como al «Tinellel» que lo agarraron en una pierna y ya no pudo seguir, sino que se cayó junto a la pared; y así si es fácil que rematen a uno, que le metan el peine completo en la carne.

Mi compadre Julián va a lamentar mucho esta vaina seguramente.
Él quiere mucho a Doña Cara y fue de los que la ayudaron cuando el papá del «Tinellel» se desapareció en el 48.
Mi compadre me ha dicho siempre que un tal Capitán Berroa tuvo que ver con esto. La verdad es que el viejo no apareció jamás y la pobre Doña Cora siempre tenía la esperanza de que lo tuvieran en la «Beata», y no se convenció hasta que mataron a Trujillo y se quedaron por un tiempo las cárceles vacías y el viejo Arturo no volvió. Tenía razón Mirito cuando me repetía en «la cuarenta» que «el peje» (como decía él de Trujillo) no perdonaba a ningún obrero que se le atravesara; y me recordaba lo que pasó cuando cayeron presos los del 14 de Junio, que a los estudiantes y a los doctores les pasaron causa en los tribunales y sin embargo a los «panfletistas» de Santiago, que eran obreros casi todos, los ahorcaron una noche y los tiraron en la incineradora. A Mirito lo mataron en la silla eléctrica un domingo por la mañana; el domingo de Resurrección, me acuerdo yo. El pobre Mirito siempre estuvo consciente de que no lo dejarían vivo. Hay una canción de Juan Lockward que me lo recuerda mucho cada vez que la oigo, porque él la cantaba por la noche en la solitaria: «Esta guitarra bohemia que vibra en mis manos». 

Mirito no cantaba bien, pero yo le pedía que cantara y él lo hacía con los ojos cerrados, me decía que cuando cantaba «Guitarra Bohemia» se acordaba del «Bar Rumoroso», porque en la vellonera lo ponían mucho, y yo le decía que sí, porque a papá lo tenían harto con ese disco. Cuando Mamá oye ese disco también se acuerda de Mirito y siempre dice igual: «Que Dios lo tenga en gloria».

Doña Cara tiene la cara más triste del mundo; parece que dice que ya no aguanta más, y es justo. En este barrio nadie ha cogido más golpes que esa vieja y nunca se ha lamentado; por eso dice «El Oveja» que el Sindicato no puede abandonarla ahora que ya perdió al «Tinellel», que era el que lo metía todo en esta casa. «El Oveja» ya habló con el tesorero y está arreglando las cosas para que la vieja no se quede en la calle. Hay que hacerlo, por Doña Cara y por el «Tinellel» también. Era un muchacho sano que creía que la vida no terminaba nunca, y tenía razón para eso, porque la verdad es que para tipos como él la vida no debía terminar tan inesperadamente. La vieja Cara lo cuidaba como si tuviera todavía tres años; fue que ella puso en él toda su esperanza después que se convenció de que a Don 

Arturo se lo tiró Trujillo. Era lo único que ella tenía, porque la otra, desde que se casó se alejó de la familia dizque porque en esta casa «sólo visitaban «comunistas» y la vieja era una apoyadora». En el fondo lo que pasó fue que Grecia calculó que esa era una buena manera de evitar tener que ayudar a su mamá y prefirió quedarse viviendo de puesto en puesto con su guardia. Ahora está en la frontera, según oí decir, y ni siquiera se dará por enterada de la muerte de su hermano. No hace falta en este velorio (como diría mamá), aquí sólo deben estar los que están, que son la gente de uno, la gente que «se ha chupado» todas las desgracias con uno y que sabe que a este barrio las cosas le cuestan caras. Aquí casi no hay extraños, somos los mismos que enterramos a Frank cuando avanzaron los yankees, los mismos que velamos a Sonia cuando la mató Pedro el zapatero porque la celaba con Urraca; aquí están Filia y Morrobel y Julio y el «Jabao», y yo, y Antulio; todos los que nunca han echado para atrás cuando hay que dar la cara. ¡Sólo falta el «Tinellel» y ahí está, con la cara machacada por los cartuchazos! Como un hombre.
¡Como un hombre! ¡Qué cosa!: Un muerto, cuando ha muerto bien, es más hombre que un vivo. Eso lo digo por el «Tinellel»: Ahora se ve como más pesado, más serio; ahí tendido en esa caja. Ahora como que uno lo ve y no le sorprende que esta mañana estuviera ahí alante «forzando la jugada» frente a los policías. Yo siempre lo creí más bocón que otra cosa, pero no me atrevo a pensarlo; ahora le tengo respeto y cuando me le paro enfrente me parece que quisiera decirme que qué estoy yo esperando para demostrar todo lo que digo, como lo ha demostrado él con su muerte.

Yo no sé por qué cada vez que veo a Dulcita me dan unas ganas espantosas de reírme. Es que sólo me la imagino bailando el «ají picante». ¡La pobre!… ella no pensaba el día de Noche Buena que a su novio se lo iban a traer el doce de enero en estas condiciones; no ha dejado un solo minuto de llorar, espantando las moscas con un cartón. Es una buena muchacha, pero yo no acabo de imaginármela en el plan de doliente, y esto debe ser por el temperamento de ella: difícilmente aparece por aquí una tipa más bailadora que esa. Yo le digo «azuquita» porque cuando yo era camarero en la Feria había una bailarina que le decían así, y a ella le pega bien ese nombre. El «Tinellel» se reía cada vez que yo la llamaba de ese modo y me decía de broma que algún día formarían una pareja para viajar por Curazao y Puerto Rico. Morrobel le seguía la corriente contándole que él tiene un primo que ha viajado mucho como bailarín, pero que primero tuvo que meterse a maricón, y entonces reíamos todos de buena gana.

Ya el «Tinellel» no puede reírse, ni podrá Morrobel seguirle la corriente; los muertos no se ríen, ni se les puede seguir la corriente; a los muertos se les acompaña y se les entierra. Uno los acompaña y los entierra, es verdad, pero después se le quedan a uno en la mente y entonces están más presentes que antes, porque ya uno no se atreve a faltarles el respeto, y comienza a creer en ellos más que cuando estaban vivos; porque como que las palabras dichas valen más y tienen más razón después que el que las ha dicho se muere… por ejemplo, ahora yo me pongo a pensar en lo que el «Tinellel» me decía cuando hablaba de las mujeres; antes yo me reía con eso pero no le daba razón porque entendía que él era muy joven y no sabía de esas cosas. Ahora ya creo que es verdad «las mujeres flacas son mejores que las gordas…» Y mira, que yo no sé por qué no le daba importancia a esas palabras si yo he tenido mejores experiencias con las flacas que con las gordas. Ah, pero uno es así, hasta que la gente no se muere uno no lo cree.

Asia era flaca y me enredó de una forma que yo no sabía si la cama era para dormir o para estar con ella solamente; después, con Silveria, cuando trabajaba en la Grenada, gozábamos tanto que de noche nos encerrábamos desde que yo llegaba del trabajo; en cambio con Luz, que era gorda, se me hacía pesado el asunto porque ella como que no entraba en calor, y a mí me gustan las mujeres que se le vayan alante a uno, que le peguen las espuelas y le obliguen a «sacar de abajo». Definitivamente las flacas son más calientes que las gordas y el «Tinellel» tenía razón. «¡El Tinellel»!
¡Qué tiguerito éste!

Mira a María poniendo una ponchera llena de hielo debajo de la caja. Siempre fue servicial María. Nunca olvido la noche en que a Mamá le dio el ataque al corazón, en los días en que me soltaron. Se portó muy bien ella, fue a buscar al doctor Bautista a las doce de la noche, sola, porque juzgó que para mí era demasiado peligroso. A gente así hay que quererla; ella tendrá sus defectos, pero qué carajo, todo el mundo los tiene. Además, ¿qué hace que le gusten tanto los hombres?
¿Para qué iba a tener entonces esas piernas y esas nalgas? Cada quien hace con lo suyo lo que le da la gana y nadie tiene que meterse en eso…

Bastante buena que está María para dejarse perder pendejamente…
Esa mosca hace rato que está fuñendo entre los ojos y Dulcita se ha cansado de espantarla con el cartón; pero, da vueltas ahí mismo y vuelve a «jeringar» andando sobre las cejas, metiéndose entre las pestañas hasta llegar al rinconcito ese donde los ojos se pegan a la nariz; Dulcita la espanta con el cartón, pero vuelve entonces por la boca y va subiendo, entra en la nariz, sale, y vuelve para caer otra vez entre los ojos.

Me mortifica esa vaina; me parece que al «Tinellel» le molesta y que él quisiera darse un manotazo para aplastarla; pero un muerto no puede espantarse las moscas de la cara, no puede hacer nada. Esa es la diferencia entre el que está muerto y el que está durmiendo; cuando uno está durmiendo no solamente puede espantar las moscas sino que puede cambiar de posición y acomodarse como mejor le convenga; pero muerto la cosa cambia, se queda uno paralizado, sin pensamientos, sin dolores de muelas, sin los chistes que uno se sabía, sin ganas de hacer nada; y lo peor es que el que está vivo mientras tiene al muerto delante, siempre cree que éste puede oír las cosas que se dicen a su alrededor; y la verdad es que un muerto no escucha nada, porque un muerto es igual que una casa vacía. Uno grita por una puerta y la voz se escapa por la otra sin que nadie responda. Sin embargo, dicen que a los muertos les gustan las casas vacías, que, si alguien se muere en esta casa, aquí se queda para toda la vida rondando. Si eso es verdad, entonces las casas están más llenas de muertos que de vivos. ¿Y cómo será cuando en una misma casa se han muerto dos personas que no se conocían? ¿Cómo pueden compartir el mismo espacio sin ser familia, sin conocerse?

Dos vivos no podrían vivir juntos en la misma casa sin nada que los una, y, es más, hay gente que, siendo familia, no pueden vivir en paz en la misma casa, sino que están como perro y gato todo el tiempo hasta que tienen que separarse definitivamente; en cambio hay muertos que permanecen juntos sin pelearse y sin conocerse.
De todos modos, los muertos no escuchan nada de lo que se dice a su alrededor, ni pueden espantarse las moscas de la cara; por eso me mortifica esa maldita mosca que está fuñendo desde hace rato entre los ojos del «Tineílel».
— ¡Dulcita, espanta esa mosca!

Nadie habla. Todo el mundo está con los labios apretados y mirando para el suelo. La gente de este barrio sabe cómo portarse en un velorio. Ya van como diez del año 61 para acá. Antes no los velábamos, pero nos juntábamos en los patios y en las cocinas a pensar en ellos y a pedir por su tranquilidad; de modo que estamos tan acostumbrados a esto que ya no concebimos que la gente de otro lugar muera de la misma forma que los nuestros, y para ser sincero, yo creo que nos hemos unido tanto alrededor de esa costumbre, que ya la muerte de otra gente apenas sí nos interesa.
No, esto no es del todo cierto. A nosotros nos duele la muerte de cualquiera, lo que pasa es que estamos tan acostumbrados a «comernos» solos a nuestros propios muertos, que francamente… bueno, no me explico qué es lo que nos pasa en realidad. Lo que yo sé es que este dolor es el mismo desde los tiempos en que José Guante apareció en el Ozama, dizque ahogado, pero con una puñalada en el corazón. De eso hace veinte años, y todavía lo recordamos…
— Sorí, ven acá… ¿a qué hora es el entierro?
— A las cuatro.
— ¿Y qué hora es?
— Las tres y media.
— ¡Qué vaina Sorí, cómo mataron al «Tinellel»!
— ¿Tú lo viste?
— ¡Sí!
— ¿Gritó?
— No.
— Si hubiera gritado también lo matan.
— Sorí…
— ¿Qué pasa?
— Diles a los muchachos que traigan la bandera…
— ¿Qué bandera? Con esa enterramos a Julio cuando la huelga…
— Tienes razón, en el barrio ya no hay banderas…

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Presidente Abindanader designó al edificio donde esta ubicado INDOTEL con el nombre del insigne poeta René del Risco y Bermudez

 


El pasado miércoles 15 de enero de 2025, el presidente Luis Abinader firmó el Decreto núm. 10-15, mediante el cual se designó con el nombre de René del Risco Bermúdez el edificio ubicado en la calle Isabel la Católica, núm. 214, sede del Centro Cultural de Indotel.

El presidente Luis Abinader,designó una comisión, encabezada por Minerva del Risco, Guido Gómez Mazara y Rafael Peralta Romero, con la finalidad de  coordinar los eventos/actos conmemorativos.

Tambien resaltó la imagen de René del Risco Bermúdez como un destacado poeta ,escritor y publicista dominicano, cuya vida y obra marcaron un hito en la historia intelectual y política del país. A pesar de su temprana partida en 1972, su legado sigue inspirando a las nuevas generaciones.

Nacio en San Pedro de Macorís en 1937, Del Risco Bermúdez inició estudios de Derecho en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, pero pronto se involucró en la lucha contra la dictadura de Trujillo, uniéndose al Movimiento Revolucionario 14 de Junio. Su activismo político lo llevó al exilio en Puerto Rico en 1960. A su regreso en 1962, participó en la revolución de abril de 1965 y formó parte del departamento de prensa del gobierno constitucionalista.

En el ámbito literario, se destacó por obras como los poemas “El viento frío”, “Oda gris al soldado invasor” y “La guerra no se olvida”, así como los cuentos “Ahora que he vuelto” y “Ton”. Asimismo, es recordado por la letra de la emblemática canción “Una primavera para el mundo”, compuesta junto a Rafael Solano y popularizada por Fernando Casado.

Con este reconocimiento, el gobierno dominicano honra la memoria de René del Risco Bermúdez y busca inspirar a las futuras generaciones a seguir sus pasos en la defensa de los ideales nacionales. Al mismo tiempo, se fortalece el vínculo entre la rica tradición literaria del país y los avances tecnológicos y educativos que se promueven en el Centro Cultural de Indotel.