Para impulsar el desarrollo del nuevo modelo de servicio”
Con el objetivo de fortalecer la seguridad ciudadana y mejorar la eficiencia operativa de sus agentes, la Policía Nacional, en conjunto con el Comisionado Ejecutivo para la Reforma Policial, general retirado Luis Ernesto García Hernández, realizó una reunión clave para evaluar los avances en la implementación del nuevo modelo de servicio y definir las próximas acciones, en cumplimiento de la disposición del presidente Luis Abinader.
En la reunión participaron el subdirector de la Policía, general Juan Hilario Guzmán Badía; el director central de Recursos Humanos, general Esteban Figuereo García; el director central de Prevención, general Ernesto Rodríguez García, y el director central de Planificación y Desarrollo, coronel Juan Antonio Bello Balaguer, entre otros altos oficiales.
“Esta es una reunión enfocada en revisar la ruta crítica por disposición del presidente Luis Abinader y centrarnos en la implementación del nuevo modelo de servicio policial que será puesto en marcha en cuatro puntos del país”, explicó el Comisionado Ejecutivo para la Reforma Policial, Luis Ernesto García.
Indicó que se continúa con la planificación de los servicios, el fortalecimiento del entrenamiento de los agentes y la dotación del equipamiento necesario para garantizar un desempeño eficiente dentro del marco del nuevo modelo de servicio policial, cuyo lanzamiento está previsto para el 22 de mayo en Santo Domingo y el 23 de mayo en Santiago.
Temas tratados

Uno de los puntos destacados de la reunión, realizada en el Palacio de la Policía Nacional, fue la validación de las habilidades de los agentes que formarán parte de este modelo, un proceso programado para la próxima semana.
“Queremos asegurarnos de que los policías salgan bien preparados y con todas las herramientas necesarias para cumplir su labor”, enfatizó García Hernández.
La meta es incorporar 20,000 nuevos agentes hasta 2028, con mayor presencia en las calles, mejor atención al ciudadano y un patrullaje más efectivo. Con estas medidas, la Policía Nacional busca modernizar sus servicios y responder a las crecientes demandas de seguridad de la población.










Las imputaciones son de tipo penal y, además del tráfico ilícito de inmigrantes, incluyen cinco casos de falsificaciones, cuatro de uso de documentos falsos, dos de estafas, uno por robo y cohecho, otro por asociación de malhechores y uno por destrucción a la propiedad del Estado.



Recientemente, Supérate promovió y apoyó el taller 


