Himno a la Patria

sábado, 12 de abril de 2025

Tragedia En Jet Set: Urge Una Investigación Rigurosa Y Transparente

 


Por doctor Ramón Ceballo

Lo que alguna vez fue el antiguo cine El Portal, y que más tarde se convirtió en la emblemática discoteca Jet Set en Santo Domingo, terminó siendo escenario de una tragedia que ha dejado a toda la nación en estado de shock. El desplome total de su techo durante un evento ha provocado no solo víctimas mortales y heridos, sino también profunda indignación social y una urgente necesidad de respuestas claras.

La destrucción de la edificación fue inmediata y total, un colapso que, según testigos y artistas presentes, ocurrió sin advertencia previa. Algunos artistas y personas que frecuentaban el lugar, incluso han reportado haber visto trozos de cemento caer del techo en otras oportunidades. Este tipo de comportamiento estructural resulta alarmante, ya que las edificaciones están, en principio, diseñadas para resistir cargas y deformaciones, mostrando signos visibles antes de cualquier colapso.

La respuesta del presidente Luis Abinader ha sido oportuna. Ahora bien, la magnitud del derrumbe exige que se inicie una investigación técnica rigurosa y profunda, con la participación de ingenieros estructurales, peritos forenses, expertos en mantenimiento de edificaciones, y autoridades independientes. No se trata únicamente de saber qué ocurrió, sino de esclarecer las posibles causas de la tragedia y determinar si hubo negligencia en los estándares de diseño, supervisión o mantenimiento del lugar.

La ciudadanía exige transparencia. Debe buscarse a los responsables por la negligencia de esta desgracia y llevar las consecuencias hasta las últimas instancias legales, sin importar quiénes estén involucrados. El caso de Jet Set no puede quedar en el olvido ni sumarse a la larga lista de tragedias sin justicia.

Además del informe oficial que se espera por parte de los bomberos y las autoridades municipales, es indispensable un informe forense de la estructura que analice el historial de mantenimiento del edificio, posibles modificaciones irregulares, y si se cumplieron las normativas nacionales de seguridad estructural.

Lo ocurrido en Jet Set es una dolorosa advertencia. Una llamada de atención para revisar no solo esa edificación, sino también muchas otras de uso público que podrían estar en condiciones similares. La vida de los ciudadanos no puede quedar en manos de la improvisación ni de la negligencia.

Necesitamos respuestas. Necesitamos justicia. Y la necesitamos ahora.

La República costurera de sus heridas; ahora sepulta una vez más sus muertos en el centro de su histórica Bandera…

 

“Aún rota pero rígida en el desplomado y pisoteado horizonte del dolor;los torturados,heridos,almordazados y muertos sembrados en el alma nacional (escudo) de banderas núnca se olvidan…”



Entre Versos Y Párrafos

 


“Lágrimas de guitarras se desangraron bajo El Tenebroso Ocaso De La Parca/Enmudecidas Espinas Del Dolor…”




              Contra vientos y mareas te defiendo….





viernes, 11 de abril de 2025

La Modernidad Nos Robó Las Lágrimas: El Desarrollo Nos Hizo Insensibles

 



Por Javier Fuentes

Viví en un barrio de la capital donde la miseria era visible, pero no monstruosa. La gente dejaba las puertas abiertas, y si alguien sufría un accidente, los vecinos corrían a ayudar. El borracho del parque era parte del vecindario, y aunque no tuviera hogar, tenía nombre.La pobreza no era motivo de vergüenza, y la dignidad no necesitaba disfraz. Había humanidad en medio de la escasez. Hoy, esa humanidad parece haberse extraviado.El desarrollo llegó con promesas de orden, eficiencia y confort. Nos ofreció seguridad, velocidad, comodidad. Pero a cambio, nos pidió algo más sutil: nuestra sensibilidad. Y se la dimos. Sin darnos cuenta, comenzamos a mirar hacia otro lado. A medir el valor de una vida por su utilidad o por su imagen. La miseria, si es visible, ahora molesta.

Nos acostumbramos a ver cuerpos tirados en las aceras como si fueran parte del mobiliario urbano. A escuchar gritos en la noche sin asomarnos. A pasar frente a tragedias con la prisa como excusa. El desarrollo nos hizo rápidos, pero no más atentos. Nos hizo ocupados, pero no más comprometidos. Perdimos la pausa sagrada que exige la compasión: esa capacidad de detenerse y sentir.

Esto no es solo una anécdota de ciudad. Es una advertencia civilizatoria. Alemania, cuna del pensamiento, del arte, de la filosofía, se convirtió en el epicentro del horror. El Holocausto no fue obra de ignorantes, sino de ilustrados sin alma. “La luz en las manos de las tinieblas solo alumbra el abismo.” El conocimiento sin conciencia perfecciona el crimen.

La tragedia del Jet-Set es el espejo más cruel de nuestra época. Un avión cae, y lo primero que algunos hacen no es llorar, ayudar o callar. Es grabar. Es robar. Es subir contenido para ganar likes. La sangre aún tibia se convierte en contenido. La muerte, en tendencia.

Nos volvimos consumidores de catástrofes, espectadores del sufrimiento, voyeristas de la desgracia ajena.

“Se alegraban de sus males, repartían sus vestidos, y sobre sus ropas echaron suertes” (Salmo 22:18).
Lo peor es que ya no nos escandaliza. Ni nos avergüenza. Hay algo roto en nosotros cuando la empatía necesita filtros para activarse.

El psiquiatra Boris Cyrulnik, testigo del nazismo, diría que hemos reprimido nuestro trauma colectivo y ahora lo repetimos de forma disfrazada. Nos anestesiamos para sobrevivir en un mundo cruel, pero esa anestesia ya no nos deja sentir ni amar. Él insiste en que solo el amor repara. Pero el amor requiere presencia, requiere escucha, requiere humanidad. Y eso es justo lo que estamos perdiendo.

Hemos creado ciudades donde la estética es más importante que la ética. Donde lo que no se muestra no existe. Donde el éxito se mide por cuántos miran, no por cuánto conmueve.

La cultura del espectáculo nos robó la decencia. Ya no basta con vivir: hay que transmitirlo. Y en ese juego de apariencias, se nos muere el alma mientras la imagen se mantiene impecable.

Es cierto que no todo pasado fue mejor. Pero había una cercanía en lo humano que hoy extrañamos. Había comunidad, aunque fuera precaria. Hoy tenemos redes, pero no vínculos.

Tenemos conexiones, pero no abrazos. Sabemos mucho, pero entendemos poco. Y esa desconexión es la raíz de nuestra insensibilidad.

El problema no es el desarrollo, sino su propósito. Desarrollarse sin corazón es crecer hacia el vacío. Es construir autopistas hacia el abismo. Es perfeccionar el método para esconder el dolor, en vez de sanarlo.

“Aunque hablen lenguas humanas y angélicas, si no tienen amor, son como metal que resuena o címbalo que retiñe” (1 Corintios 13:1).

Lo que debería hacernos mejores, nos está haciendo más fríos.

Debemos preguntarnos: ¿qué clase de sociedad estamos construyendo? ¿Una que avanza sin mirar atrás, sin mirar al lado, sin mirar al otro? ¿O una que aún se detiene ante el que cae, ante el que llora, ante el que sufre?

Necesitamos rebelarnos contra la frialdad.

Recuperar la capacidad de estremecernos. Volver a sentir como acto de resistencia.

Tal vez lo que más necesita el mundo no es más velocidad, ni más pantallas, ni más algoritmos.

Sino más corazones abiertos. Más manos extendidas. Más ojos que se atrevan a llorar por otro.

Más personas dispuestas a decir: “Esto duele, y no lo voy a ignorar”. Porque cuando la insensibilidad se normaliza, la barbarie encuentra terreno fértil.

El gran pecado de esta generación no será tanto la maldad de los perversos, sino el silencio de los insensibles.

“Por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará” (Mateo 24:12).

Ese enfriamiento es el peor síntoma del alma contemporánea. No grita, no hiere, pero mata.

Mata en silencio, por omisión, por inercia. Y mata mucho.

Hay una urgencia por despertar del letargo. Por volver a ver al otro no como una molestia o una amenaza, sino como un reflejo de uno mismo. Por devolverle humanidad a la vida cotidiana. La ética no está en los discursos, sino en lo cotidiano: en cómo reaccionamos ante el dolor ajeno.

“Llorad con los que lloran” (Romanos 12:15). Y si ya no podemos llorar… entonces algo en nosotros necesita resucitar.

Que este llamado no quede solo en palabras. Que nos permita mirar hacia adentro, tocar nuestras fibras más humanas y redescubrir el valor de sentir.

Porque no hay civilización sin ternura, ni futuro sin compasión. Y porque, como advirtió una vez alguien el más sabio, “¿de qué le sirve al hombre ganar el mundo entero, si pierde su alma?” (Marcos 8:36).

Sobre el autor: Es politólogo, escritor y analista internacional. Ha publicado ensayos sobre geopolítica, literatura y profecía bíblica en medios y foros especializados. Actualmente reside en Nueva York, donde impulsa iniciativas de liderazgo político entre la diáspora dominicana.

 


La Noche Más Negra

 



Por:Christian Paniagua 

…¨es delito morir un día bonito¨, se lamenta Alex, un muchachón de los bajos de Haina que hasta hace un año fue prospecto al Beisbol y una lección en su hombro derecho -tras la caída de un motor- lo separó de sus aspiraciones a las grandes ligas. Pero Alex -de buena jeta y que sabe dónde pica el peje- no se rendiría:decidido a escalar -a ser rico- este lunes fatídico vino al santuario de los exquisitosdominicanos a levantarse una hija de Papi y Mami que -tras el braguetazo- lo saque de la pobreza más temprano que tarde.

    Alex ya había bailado un set con la escogida -linda por demás la hembra- y esperaba, fuera del baño de damas, a la joven que fue al tocadora retocarse el maquillaje: de repente,zass:cancelada toda risa. Han llamado a morir una noche hermosa, en un lugar tibio, así, imprevistamente, dejando truncas las frases,los tragos a medio apurar, los planes abruptamentediezmados

    El cielo se le vino encima¨¡Guay mi madre!¨Ahora, Alex y sus sueños yacen sobre el piso del Jet Set Club, tapiado por cinco capas de cemento irresponsables: los huesosquebrandose en secuencia, bajo el peso de escombros tramposos que ya lo sentenciaron a morir. Pero, Alex nrespira y a ras de suelo,llega hasta la puerta del baño de damas donde ve a su chica, su porvenir aplastado por una viga de hierro: muerta, pero todavía radiante.

    Todo es lamentos, llantos y gritos… Contrario a la felicidad que setecientos mortales,entregados al placer, proclamaban hace un rato. Y, Alex, desangrándose en el dilema, busca razonar, pero el suceso es traumático, metamórfico. Tan improbable para un mortal que hace un rato bailaba con el amor yahora,el estremecimiento mismo es su contrario, su asedio, la carga del que está atrapado en una pesadilla: ¿cómo hará para quebrantar las leyes de la gravedad? ¿Qué pasó de repente que lo condena a ranear entre escombrossollozos y brumas de ensueños? Debajo de una ciudad que no le lo tomaría en cuenta ni le echarade menos.

    Alex ve y escucha todo, allá abajo; el gentío, la conmoción, el ir y venir de las cuadrillas de socorro, que auxilian, pero antes colectan –salvan primero los valores de los caídos- y Alex, el cementar que por amor a poco sucumbe en la víspera, a ritmo de merengue en los dinteles del recuerdo, bajo el techo del sitio de su conquista, donde acudían los más felices de la República, ahora es un sepulcro infame y Alex; parte de esa molienda

    Todo pasa y nada queda, pero, aflora una sonrisa en los labios ensangrentados de Alex -se despide- tras 17 horas atrapado; se rinde. Expira,llorando por la que breve fue su hembra, su asaltobalcones más exquisitos: ¿Quién diría? En la pista de baile danzaba también la muerte, sediciosa, meliflua y, Alex, ahora -pasa a mejor vida- flota sobre ese edificio negro –desplomado- mate como un ataúd gigante, hecho despojossobre la ciudad de Santo Domingo y sus estúpidas y corrompidas normas de regulación

    Allí estaba El hace poco y de repente esto:toda lógica hecha añicos. ¡Rayos! Es verdad, Alex flota, yerra de un mundo a otro, huraño y,¿cómo explicarlo? Pues no levita, más bien vuela; no sube, no desciende, pero se desplaza. Luego, apuntemos que esto suena a fábula, que parece un cuento de terror, pero… Alex no cae en cuenta sobre su situación. Ni le anima increpar a Dios, despotricar que la madre naturaleza es indolentesiempre aliada al fallo oculto -del lado de los corruptos- de los hacedores de fortunas que no aguantan una auditoria. Mismos que ponen y quitan a los miembros de la Cámara de CuentosTutumpotes que superan toda inspección sobornando. Retorciendo y recargando la realidad hasta que revienta y ahora Alex y la hembra que casi fue suya, son historia, cadáveres, despojos, temas de conversación para los que blasfeman en los medios… ¿Y quéhacer? En contra de su voluntad Alex es su espirito, bruscamente despedido de tan bello cuerpo. 

    Por eso sigue negado. Por la fuerza del amor desanda pasos sobre el sitio de la tragedia. Su cabeza es una orgia: placeres, trozos de su vida entera vuelan allí dentro, la vez que conoció la Zona Colonial, su primer guante y bate, BocaChica, su cumpleaños número 10, sus amiguitos,su madre brindándole dulces y trozos de arepala yerba para los camellos de los Reyes Magos. El,corriendo bajo la lluvia, su primera novia, los gritos en el Play y él,arrebatado, gozoso, soñando con ser pelotero y,de repente esto; no concibe esa tanda de placeres que lo distrae hacia otro mundo, la celada, cómo lo embala el destino para que no se resista a un ¨viaje¨ que él jura se desvanecerá una vez merme la santa nota que lo adormila, cortando el chorro de remembranzas que, supone,es el efecto del amor a la hembra que lo conquistó y ya se fue.

    Pero lo cierto es que el tunante se va del mundo de los vivos a instancia de la muerte. El Club de los extras felices se derrumbó a ritmo de merengue y wiski: la muerte está de pláceme. A Alex y a dos centenares de extintoslo asedia la que algunos tildan de piadosa, en esencia, y que nunca enseña una sola cara. Si, la muerte aveces llega seca, indolente, desafiante, sin chispa de paciencia. Mientras, otros avisos acuden de espacio, galantes y hasta placenteros Cuando no, al estilo Luisin Mejía y su frase ¨Dios tiene los juegos pesao¨.

    Entonces queda dicho, manifiesto; lo que de la muerte proviene, para bien, para mal, ya mentira, ya verdad, siempre concita dudas y arrebatos en la mente de los mortales que miran -de lejos- y cerca del acto. Ningún muerto se i sin la explicación de lugar, sin que sean indemnizados parientes y estropeados: ¿habrá una Póliza, vigente, que responda? Los amigos de los medios excavaran los fondos, le sacaran partida a la tragedia hasta que otro percance mayor surja. Así de simple, muertos al hoyo y taimados a la colecta. Sin importar que de tanto joder el parto muevan la palanca de la muerte, otra vez, y la tristeza cubra los ánimos de la República como una nubeestacionaria, desafiante -allá arriba- consuelo para dolientes y amigos, pero, materiaprima para políticos y facinerosos con ansias de poder…

    Triste es el caso, pero el llamado a morir llegó desapercibido, sin notificar, desabrido y con la suerte de soberanas notas de prensa. Luego, morir en medio de fiestas y algarabías, trágicamente, irrumpiendo contra todo placer, es abusivo. ¡Vale condenar a la Parca! Si alguiensabe cómo atrapar la señora muerte y reducirla a limpiar retretes, me alegraría,rechazo la trastada: no serpientes en esos paraísos. Por eso las víctimas del desplome del Jet Set de Santo Domingo -ahogados en vino y bajo escombros- instaron al Cielo en todas sus formas ¨¡Sálvame, Señor!¨¨¡Virgen de la Altagracia!¨ ¨Oh, my God!¨¨¡Auxilio, Jehová!¨¨¡Mio Dio. No obstante, por ser fiestairregular -en día no festivo- dioses ysantosandaban de rumba por otros litorales: no respondieron, se excusaron al soborno del dueño del lugar y, las deidades que acudieron al llamadocarecían de méritos para salvar a los condenados,azuzando el caos, allanando el camino donde la muerte tendió sus redes, inflexible; provocólamentos, pataleos de inocentes que momentos antes solo transpiraban placer… Loas a la buena vida¨¡Que siga la fiesta ¨¡Volveré, volveré, porque te quiero!¨, se escuchaba gemir, entre escombros en tonos de duelo

    Todos finados por la insensates; ricos y pobres, justos y pecadores. Los que llevaban una u otra doble vida. ¨Pero ¿morir en la víspera? ¨, alega al fin Alex, aceptando que ya se va de este mundoque lo marginó. El trauma le ha licuado los sentidos y, a pesar se resigna -a regañadientes- reniega el llamado a juicio en medio de una cita, una noche bonita¨Es delito morir un día bonito¨,expira Alexdespachándose. Dolido porque él, pobre, no considera una misa en La Catedral -al Purgatorio sin abogado- nadie le echara de menosy, CASO CERRADO para no alentartristeza queahuyente el turismo. Luego -mañana mismo- al morbo y al bla bla bla Alex -el soñador- su vida entera y la de 200 y tantos condenados quepor la salud del Peso -por la fuerza de la tasa cambiariaserán almas en penaidos a destiempo que no pasaran al olvido ni en 19 días; ni en 500 noches

    Waaao, cómo duele… pero…

    ¡LA VIDA SUGUE SU AGITADO CURSO!


DGM Detiene A 1339 Nacionales Haitianos Ilegales Y Repatría Otros 1,322 Para Controlar Inmigración

 


 SANTO DOMINGO.- La Dirección General de Migración (DGM) detuvo ayer a 1,339 nacionales haitianos indocumentados y procedió a la repatriación de otros 1,322 por las distintas puertas fronterizas binacionales, en acciones para controlar la inmigración ilegal y fortalecer el orden público.

Las detenciones son el producto de interdicciones desplegadas en el Gran Santo Domingo (143), Santiago (42), La Vega (55), región Este (159), Azua (18), Barahona (49), Montecristi (10) y Puerto Plata (46). A esas aprehensiones se agregan 610 hechas por miembros del Ejército de República Dominicana, 188 por efectivos del Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza y 19 por agentes de la Policía Nacional.

Los extranjeros detenidos en los operativos de control migratorio son trasladados a los centros de retención que la DGM tiene en Haina, Benerito, Santiago y la zona fronteriza, donde se les toman los datos biométricos, huellas dactilares, fotografías y nombres.

Esos procesos se realizan respetando los derechos humanos, la dignidad de las personas, acatando los valores fundamentales y con todas las garantías del derecho nacional e internacional.

Las operaciones de interdicción, además del ERD, el Cesfront y la PN, también se coordinan con el Ministerio de Defensa,  la Armada de República Dominicana (ARD), la Fuerza Aérea de la República Dominicana (FARD), la Unidad Militar Fuerza de Tarea Conjunta Ciudad Tranquila (CIUTRAN) y la DIGESSETT.

Las autoridades han enfatizado que continuarán desarrollando operativos similares en todo el territorio nacional, asegurando que las acciones se realicen de manera ordenada y eficiente y con el objetivo de asegurar el cumplimiento estricto de la Ley General de Migración y proteger los derechos de todos los ciudadanos.


DGM Apoya La Repatriación Voluntaria De 114 Nacionales Haitianos Ilegales


Advierte mantendrá interdicciones

 SANTO DOMINGO.- La Dirección General de Migración (DGM) apoyó la repatriación voluntaria de 114 nacionales haitianos en condición migratoria irregular, quienes ayer decidieron retornar a su país de origen.

El organismo oficial, asimismo, dio a conocer que está brindando asistencia con seguridad y respeto, para que todos los extranjeros indocumentados que se encuentren en el país y por voluntad propia deseen retornan al suyo, lo hagan sin preocupación.

De las 114 personas que retornaron, libres de coacción, 89 salieron por la puerta binacional de Dajabón, procedentes de Santo Domingo (71), La Vega (15) y Santiago (3), y 25 lo hicieron por el paso fronterizo de Pedernales.

La DGM expresó que ese apoyo se corresponde con la iniciativa del presidente Luis Abinader exhortando a los nacionales haitianos en condición irregular a abandonar el país. Indica que quien quiera retornar a su país sólo tiene que comunicarse con la DGM confirmando su decisión de repatriarse.

Para iniciar el procedimiento, el interesado puede llamar al centro de llamadas (Call Center) de la institución, teléfono (809) 508-2555, extensión 0 y manifestar su deseo. También puede llamar gratis a la Línea 311 y pedir comunicarse con la DGM ó escribir al portal www.311.gob.do expresando su intención.

La DGM especificó que el apoyo que está ofreciendo para el retorno voluntario de los extranjeros en condición irregular es independiente de las medidas de control que se implementan en estricto cumplimiento de la Ley 285-04, que dispone una política migratoria  segura y ordenada para salvaguardar el orden y la soberanía nacional.

La DGM advirtió, asimismo, que continuará cumpliendo las directrices del presidente Luis Abinader  y el mandato del Consejo de Defensa y Seguridad de la nación, para salvaguardar la seguridad y soberanía nacional.